viernes, septiembre 14, 2007

Dudas existenciales post elecciones


Colaboración de: Crsitian Ozaeta


La gran mayoría de opiniones en los medios escritos, durante este ambiente tropical de post-elecciones de primera vuelta, pretenden afanosamente declararse como pioneros descubridores de una verdad esclarecedora, impactante, reveladora, que marca el signo de los tiempos, tan clara y profética que nadie sabe a ciencia cierta ¡cómo es que nadie lo pudo ver antes!

Hablan que Guatemala… señores y señoras… es un país de derecha.

Preguntan a los cuatro vientos desde la plataforma universal de sus páginas editoriales: ¿en dónde está el voto indígena? Ese mismo –dicen- que “abandonó a Rigoberta Menchú”, el que apoyó al FRG en Quiché, que le dio la espalda a la ANN condenándola a su desaparición, que apenas y le otorgó algo a la exguerrilla en Sololá.

“El voto indígena”, ¿qué es el voto indígena? Por más que pongo a trabajar al hamster incrustado en mi cavidad craneal, haciendo las veces de cerebro, no logro identificar, en blanco y negro, qué es el “voto indígena”. Y la izquierda, ¿quiénes son la izquierda entonces?

Pareciera, por lo que escriben, que “voto indígena” y “voto de izquierda” son categorías que significan lo mismo. ¿Están diciendo que el indígena, al no votar por la izquierda, es un “voto desleal”?

Entonces, ¿la izquierda es indígena? ¿Y qué pasa si no soy indígena, soy de derecha entonces? Y peor aún: ¿Qué son los indígenas que votaron por algún partido de derecha? ¿Qué son los indígenas que no votaron por un –a- indígena? ¿Serán una especie de tránsfugas identitarios porque, siendo indígenas no hicieron lo que se esperaba de ellos?

Pienso con estas luces, que “voto indígena” sería el voto que sufragan todas aquellas personas que se consideren a sí mismas, o que la sociedad en general considere que son, indígenas. Es decir, el voto de las personas oriundas de un lugar, en este caso Guatemala, y que culturalmente son, se consideran o se les considera mayas (en su mayoría).

Si “voto indígena” es una categoría de voto, y no una identidad étnica, entonces la otra categoría es “voto no indígena” –un término de lo más ambiguo-. Por lo tanto en Guatemala debería de haber un sistema bipartidista entre el partido de “los indígenas” y el partido de “los no indígenas”.

¿Y la izquierda y la derecha en donde caben en esto?

¿Si toda causa que promueva los derechos de los marginados, excluidos y discriminados es izquierda… entonces los indígenas sí son de izquierda? Y los ladinos son derecha. Si hay ladinos tolerantes y promotores de justicia social, ¿son ladinos indigenistas-izquierdistas? Si hay indígenas empresarios, promotores del a propiedad privada, la mano dura y el libre mercado ¿son indígenas ladinizados de derecha?

Rigoberta Menchú, es una mujer, indígena, del área rural, perseguida por los regímenes militares de corte fascista, integrante de organizaciones campesinas de base, ganadora de un premio Nobel, fundadora de una organización social, empresaria de farmacias y acompañada de un finquero cafetalero y una diputada exdirigente social, ¿qué es Riogoberta? ¿Y los que votaron por ella, ladinos o indígenas?

¿Hay tal cosa como voto indígena?

4 comentarios:

gulartecos dijo...

En Guatemala la derecha se disfraza de izquierda para época electoral, porque termina ofreciendo lo que sabe que por su misma ideología no podrá cumplir. Así, vemos a candidatos hablando de justicia, desarrollo rural, combate a la pobreza, empleo, educación sin distinciones, acceso a la salud... Realizan la actuación del papel de gente del pueblo, solidarios con los pobres hasta críticos de los "dueños y patrones", combatientes contra la oligarquía, en fin, cada vez más se convierten en una caricatura de persona. Esto, porque no significan nada sólido a ofrecer, más que la defensa de los intereses del sector oligárquico que todos ellos representan. ¿Dónde caben los pueblos indígenas en esta lógica? Creo que hasta hoy, indígenas y ladinos compartimos una misma realidad: somos testigos del desfile de caricaturas de candidatos a la presidencia. Sin embargo, comparto la misma interrogante: ¿qúé significa y en qué consiste el "voto indígena"? ¿cómo reacciona frente a este montaje que se realiza cada cuatro años que no es más que un simulacro de lo que debería ser una democracia?

Anónimo dijo...

Alguien también, en cierta parte, se pronunció en estos temas, aunque por aparte. Desde su tribuna especial en Siglo XXI. Nada más y nada menos que don Estuardo Zapeta. Lógico ¿a quién más le darían esa misión y ese 'privilegio' de comentar la "derrota de Menchú", si no al así mismo llamado "indio" liberal. Vean:

http://www.sigloxxi.com/index.php?link=opinion

Cristian.

Anónimo dijo...

La intención de voto o la simpatía por determinado pensamiento ideológico no es dependiente de una identidad étnica. Es mucho más amplio, sino estamos limitado la capacidad humana de pensar, discernir, percibir y concebir el mundo de acuerdo a las experiencias personales.

Si nos limitamos a pensar que el voto indígena es exclusivamente un voto de izquierdas, tácitamente estamos asumiendo que todos los votos ladinos son derecha. Y con ello, estamos uniformando, estereotipando, encasillado y/o eticándonos como si fuera productos, no seres pensantes con diferentes realidades, sueños y expectativas.

Vilma

esnecesariohabervivido dijo...

me parece muy buen artículo. Es que el sistema político de Guatemala y sus "brillantes analistas" crean categorías tan cortas e incoherentes que admiran por su estupidez!

siempre por acá visitando....

rebeka